Está el patio revuelto y el personal nervioso últimamente, va a haber que repartir algunos lexatines en los conciertos. Aunque también es verdad que algunos incidentes merecen más bien ser saldados con un buen soplamocos al que los causa. Ya me han leído ustedes bastantes veces referirme al asesino del móvil, el canalla del caramelo […]
Entre tirarse de los pelos o ir a la peluquería